Para qué sirve un CRM

Un CRM es un programa informático para grandes y pequeñas empresas que puedes instalarte en el ordenador o usar de forma online y sirve para ordenar la información de tus clientes y administrar las tareas de los empleados. Obteniendo más control sobre tu trabajo.

Las siglas en inglés son Customer Relationship Management, Gestión de Relación con los Clientes. Y sirve para:

Gestionar clientes:

Registrar los datos de nuevos clientes o clientes potenciales de forma más automatizada.

Clasificar a cada cliente en función de su situación y sector.

Controlar las tareas realizadas, conocer los temas tratados y el tiempo empleado de cada cliente.

Detectar comportamientos y patrones de los clientes para anticiparse y ofrecerles mejor servicio.

Crear oportunidades de venta situando a cada cliente en el proceso de compra. Pipeline.

Enviar mensajes automatizados y personalizados a cada cliente.

Conocer el tiempo que le has dedicado a cada cliente.

Crear facturas automatizadas y personalizadas para cada cliente.

Gestionar empleados, colaboradores (usuarios):

Automatizar las tareas administrativas (como las indicadas anteriormente)

Coordinar y organizar el trabajo y repartir tareas a cada usuario.

Registrar el tiempo dedicado a cada tarea y el usuario que lo ha realizado.

Facilitar el uso del CRM, siendo fácil de usar incluso para nuevos empleados.

Aumentar la productividad particular de cada empleado o usuario.

Gestionar la empresa:

Tener de forma sencilla una visión general de la empresa para conocer la situación en la que está.

Tener información útil de la empresa para tomar las mejores decisiones.

Tener todos los canales de comunicación (mail, correo, teléfono, etc) coordinados y en un mismo lugar.

Aumentar la productividad en general de la empresa.

Gestión del propio CRM:

Contar con un soporte técnico y atención al cliente adecuados para solucionar cualquier incidencia y no perder tiempo.

Ser fácil de implementar en las empresas y de usar para los usuarios y empleados.

Ofrecer información sobre el servicio que ofrece y cómo se puede adaptar a la empresa.

Estar actualizado con nuevas versiones para adaptarse a las nuevas tecnologías y necesidades de las empresas.

Adaptarse a las necesidades de cada empresa ya sea grande o pequeña esté en un sector u otro.